domingo, 31 de julio de 2011

DEMOCRACIA YA en Israel: nueve manifestaciones de protesta social simultáneas tuvieron lugar anoche en otras tantas ciudades de Israel

31/07/11 Casas, comida, todo se encareció. Ayer hubo nueve marchas. Grave desafío para el premier Netanyahu.

PorShlomo Slutzky
Jerusalen. Especial Para Clarin
Los organizadores de las nueve manifestaciones de protesta social simultáneas que tuvieron lugar anoche en otras tantas ciudades de Israel no se imaginaron el éxito de la convocatoria, que sobrepasó sus expectativas y las del gobierno de Benjamin Netanyahu, cuyo nombre fue abucheado por miles de manifestantes unidos en una consigna: “¡El pueblo exige justicia social!” .
Mientras que el gobierno de Netanyahu se prepara para enfrentar diplomática y militarmente el posible reconocimiento del Estado Palestino por parte de la Asamblea de las Naciones Unidas, bajo las narices del gobierno y del Parlamento, una ola de protestas sociales amenaza “no sólo cambiar el gobierno sino las reglas del juego”, como dijo Dafi Lip, quien quizás permanezca registrada como la promotora de la revolución social israelí 2011.
Dafi, de 25 años, se quedó sin casa cuando el dueño quiso subirle el alquiler . La pérdida del hogar no significó la pérdida de la iniciativa. Fue así que la joven le pidió a varios de sus amigos de Facebook que publicaran que empezaba a vivir en una carpa en el Bolulevard Rotchild, frente al teatro nacional Habima.
En pocos días, la carpa se convirtió en un campamento de protesta por los valores desorbitantes del alquiler de la vivienda en Israel y la falta de ayuda del Estado tanto en el control de precios como en la construcción de viviendas públicas, como parte del proceso de privatización.
Aquella protesta original se combinó con una demanda que parecía menor, el alto precio del queso cottage, muy preferido aquí y que probó la fuerza de este nuevo movimiento. Estos “indignados” israelíes se organizaron para demandar en conjunto y, finalmente, el precio del queso cayó 30%. Entonces fueron por más, en reclamo de la baja del precio de los combustibles, de los impuestos.
La presión creció de tal modo que el atribulado Netanyahu, un derechista de ideas ortodoxas liberales, comenzó a ofrecer planes de emergencia que fueron rechazados por los manifestantes como vanos “intentos de romper la solidaridad de la protesta”. También hubo un tibio planteo de bajar otros costos como los impuestos.
La protesta por la carestía de la vivienda, se unió con otra de los médicos por la salud pública; con la de los padres por los altos precios de los jardines de infantes públicos; y con la clientes organizados que luchan contra el alza de precios en general. Juntos, el sábado 23 reunieron a 20 mil manifestantes en Tel Aviv, y ayer a no menos de 80 mil en esta ciudad, una cantidad de asistentes que también se registró en otras ocho ciudades del país, número sin precedentes en las protestas de Israel .
Ofer Eini, el Secretario General de la CGT del país se reunió con los líderes de las marchas prometiendo apoyar sus demandas y exigir a Netanyahu que llame a una reunión antes de que la central sindical se vea obligada a tomar medidas de fuerza.

Un informe anti-imperialista sobre Libia, en Rebelión

Sobre Libia
Informe anti-imperialista

Uruknet

Traducción Susana Merino (tomado de Rebelión)
El 9 de julio participé en una manifestación frente a la Casa Blanca cuyo lema era “Paren de bombardear a Libia”. La última vez que había participado en una protesta contra los bombardeos usamericanos a un país extranjero, que la Casa Blanca, como ahora, estaba vendiendo como una “Intervención humanitaria” fue en1999 durante el bombardeo de 78 días a Serbia. En aquel momento fui a un par de esas manifestaciones y en ambas fui virtualmente el único usamericano que asistía. El resto, una docena tal vez, eran casi todos serbios. La “intervención humanitaria” es un instrumento de venta del imperialismo, especialmente para el mercado usamericano. Los estadounidenses están desesperados por renovar su gran fe en que EE.UU .significa bueno y en que todavía son “los buenos muchachos” En esta oportunidad unas cien personas participaban de la protesta, no sé si alguna era libia, pero había un nuevo componente – casi la mitad de los participantes eran negros, con carteles que decían “ Paren de bombardear Africa” Había también otro nuevo elemento –en frente nuestro del otro lado de la avenida Pennsylvania, unos cien metros más lejos - había gente que apoyaba el bombardeo a Libia. Había gran cantidad de libios, probablemente habitantes de la zona, que vivaban solamente a los EE.UU. y a la OTAN. Sus argumentos planteaban que Gadafi era tan malo que era preferible soportar cualquier cosa con tal de que se fuera, incluyendo el bombardeo diario a su país, que ahora supera los 78 días serbios. Por supuesto crucé la avenida y discutí con algunos de ellos. Comencé diciéndoles “odio al hombre que está allí (señalándoles la Casa Blanca) tanto como ustedes odian a Gadafi. ¿Ustedes creen que por eso yo apoyaría el bombardeo de Washington? ¿La destrucción de sus hermosos monumentos y de sus edificios así como la matanza del pueblo?. Ninguno de los libios intentó contestarme. Solo repetían su cantinela anti Gadafi. “Usted no entiende. Tenemos que echarlo. Es brutal” (Ver el video de la CNN del 1 de julio en Tripoli en que se indica que el punto de vista de esos libios no está generalizado en Libia). “Pero ustedes obtuvieron educación y servicios médicos” les señalé. Mucho más de lo que tenemos aquí. Y Libia tiene el más alto nivel de vida de toda la región, por lo menos hasta antes de los bombardeos de la OTAN y los EE-UU. Si Gadafi es brutal ¿qué piensan ustedes de los otros líderes de la región que Washington apoya desde hace mucho tiempo? Uno replicó que también había habido libertad de educación bajo el rey, que Gadafi había destronado. Soy algo excéptico en eso pero no sé si eso era así de modo que le repliqué: ”¿A si? Gadafi por lo menos no eliminó la educación gratuita como lo hicieron los gobernantes ingleses en estos últimos años” Pronto apareció un oficial de policía y me hizo volver a mi sitio anterior. Estoy seguro de que si le hubiera pedido una explicación, el oficial se habría justificado diciendo que solo trataba de prevenir que estallara la violencia. Pero no había ningún peligro de que eso sucediera; otro ejemplo de la mentalidad de la policía estatal usamericana – el orden y el control están antes que las libertades civiles, antes que cualquier otra cosa. Muchos usamericanos escuchando mi conversación con los libios habrían intercalado algo así como: “No importa cuanto odie usted al presidente usted puede cambiarlo a través de una elección. Los libios no pueden hacerlo” Y yo les hubiera respondido: “Bien yo tengo la libertad de reemplazar a George W. Bush por Barack Obama. Oh! Que alegría, mientras nuestras elecciones se hallen mayormente definidas por el dinero, nada puede cambiar significativamente”

Postdata: en medio de la tristeza y el horror que rodea a la masacre noruega, no debemos perder de vista el hecho de que la “pacífica pequeña Noruega” participó en el bombardeo a Yugoslavia en 1999; con tropas en Irak; con tropas en Afganistán y ha proporcionado aviones a la OTAN para bombardear Libia. Los adolescentes de esos países que perdieron sus vidas a causa de las mortales máquinas de los EE.UU./OTAN querían llegar a ser adultos igual que los adolescentes noruegos. Aún condenando totalmente el “extremismo” como lo hacen Noruega y el resto del mundo debemos preguntarnos si esa conducta del gobierno noruego, tanto como las de los EE.UU. y de la OTAN no son “extremistas".

sábado, 30 de julio de 2011

"El default o el ajuste perfecto" ( o el timo perfecto) De Raúl Dellatorre

El default o el ajuste perfecto
 Por Raúl Dellatorre (de Página 12)
Paradójicamente, los temas que en Argentina no pudieron resolverse por un debate de ideas sino a través de una demasiado extensa lucha política, con enormes costos económicos y sociales, hoy aparecen reflejados en la vidriera del mundo, con Argentina en el rol de cómodo espectador y crítico. La crisis griega y los créditos condicionados a una salvaje política de ajuste, el adelanto de elecciones en España como consecuencia de otra crisis que al gobierno se le ha vuelto indomable, el derrumbe de economías sometidas al predominio de los capitales financieros por sobre los productivos, son escenas que hoy se repiten como en cámara rápida frente a los ojos de los argentinos. Sucesos que ocurren en tierras lejanas, pero que rememoran dolorosas experiencias propias del pasado. Y, como si todo aquello fuera poco, ahora el show de la economía mundial presenta su número más fuerte: el probable default de la economía estadounidense.
Creer o reventar. Algunas frases de la disputa entre demócratas y republicanos en el Congreso estadounidense parecen extraídas, sin adaptación siquiera, de los archivos de diarios de la Argentina del 2001. El título del conflicto en Washington es la ampliación de la autorización de endeudarse para el gobierno federal, pero el eje político del conflicto está en otro lado: cómo será el ajuste de las cuentas públicas que deberá aplicar el gobierno de Barack Obama para que los representantes (diputados) de la oposición le otorguen la mencionada autorización.
“Recorte de gastos”, “reducción de partidas para la seguridad social”, “cumplir con los compromisos de deuda para no perder credibilidad”, son algunas de las frases que las crónicas ponen en boca de congresistas o funcionarios del gobierno en esta disputa, generando una rara sensación de mal recuerdo pero a la vez ajenidad, a los oídos de los argentinos. Quien observa la crisis estadounidense desde la Argentina podría decirse, autocomplaciente, “nosotros ya la vivimos pero pudimos superarla”, o plantearse un objetivo más exigente y analizarla con el fin de sacar conclusiones. Ver si las medidas que allí se discuten hoy, y que aquí se aplicaron con consecuencias nefastas, también las “pudimos superar”, sacando las conclusiones correctas en cuanto a su efecto de daño. O, por el contrario, todavía acechan desde algún lugar y amenazan volver a plantearse en cuanto las condiciones se lo permitan.
Por este segundo camino, lo primero a observar es que la derecha estadounidense, el Partido Republicano (considerado en su conjunto), ya ganó la primera batalla: en el debate político ya se impuso como verdad absoluta que “lo que todos quieren” es que el gobierno federal se ajuste el cinturón, reduzca “gastos excesivos”, busque “equilibrar las cuentas”. Tan impuesto está este criterio que ni Obama ni el Partido Demócrata lo enfrentan. Se hacen cargo de que el déficit presupuestario de 1,5 billón (millones de millones) de dólares debe ser intervenido quirúrgicamente en lo inmediato. Y llevan la discusión a “de qué forma” y “en qué partidas”. Tan ostensible es el triunfo político en este plano de la derecha que hasta la propuesta “progresista” de los demócratas en el Congreso incluye una reducción de partidas de gastos sociales, “pero no tan abrupta” como la que proponen los republicanos.
Lo que quedó relegado a segundo plano es que Estados Unidos aún no salió de la depresión que le produjo el pico de la crisis financiera y arrastra con una enorme masa de habitantes que vive de subsidios del Estado. Cualquier recorte del gasto social tendrá un efecto recesivo sobre la economía. Cualquiera de los proyectos en danza (republicano, demócrata o uno consensuado) recortará, en mayor o menor medida, el gasto social. Si no hay acuerdo y se declara el default, la primera medida que deberá adoptar el gobierno federal es postergar pagos de beneficios sociales (el miércoles 3 tiene vencimientos de la seguridad social por 23 mil millones de dólares). En todos los escenarios, los gastos sociales pierden. Primera batalla ganada por la derecha.
En la Argentina de 2011, ¿podría afirmarse que el gasto social sería prioritario e intocable para todos, si existiera riesgo de déficit fiscal, aunque más no fuera de forma temporaria? Habrá que admitir que, aunque hoy el tema esté apartado del debate, si se tratase entraría en el terreno de la disputa.
Lo segundo que debe observarse de esta particular crisis estadounidense es que el tema que da título a la disputa, el monto autorizado de endeudamiento, en realidad no le importa a nadie y es una simple excusa para debatir otra cuestión, que es el uso de los recursos del presupuesto. La elevación del tope de deuda por el Congreso ha sido un trámite durante décadas, sin que por lo general se planteara que era eso “o el default”. En 78 ocasiones se subió el tope de deuda desde 1960 a la fecha, 49 veces bajo gobiernos republicanos. Para los republicanos, 14,3 billones de dólares de deuda no es hoy mucho ni poco, sino la excusa perfecta para dejar a Obama sin autorización presupuestaria para seguir aplicando su política. Y plantar una discusión acerca de en qué medida debe hacerse el recorte presupuestario.
Pero como no se discute el porqué del monto de la deuda, tampoco se debate en Estados Unidos acerca de las razones que llevaron a este nivel de endeudamiento. Obama asumió en enero de 2009 con una deuda pública de 10,6 billones de dólares, que ya venía creciendo en forma aritmética en los últimos dos años de la administración Bush. En 30 meses la llevó a 14,3 billones, es decir con un crecimiento del 35 por ciento. ¿Por qué? Tanto el actual presidente como su antecesor utilizaron ingentes recursos públicos para salvar a corporaciones industriales y financieras, seriamente comprometidas por el desbarranque de la economía dominada por la lógica financiera. Habían sido los líderes de la economía especulativa, fueron los beneficiarios del rescate pero no serán ahora los que paguen los costos, que recaerán sobre las espaldas de los beneficiarios de planes sociales.
De la crisis a la que llevó el modelo neoliberal en la Argentina de los ’80 y los ’90, ¿se planteó un debate sobre quiénes fueron los beneficiarios y quiénes pagaron los costos cuando estalló? El corralito a los depósitos y la megadevaluación de 2001 y 2002 no fueron, precisamente, medidas neutras ni equitativas al repartir los costos.
Naomi Klein, una reconocida ensayista norteamericana, concluye en su trabajo La doctrina del shock que las elites financieras aprovechan los estados de conmoción por la crisis para suprimir conquistas sociales. Y hacerles pagar a las clases ajenas a la cúpula dominante los costos de la crisis. ¿No fue ése el caso para salir de la convertibilidad? Pero también podría plantearse el interrogante, ¿será el actual “peligro de default” en Estados Unidos otro ejercicio de cargar el costo de la crisis sobre las espaldas de las clases sociales medias y bajas?
Si hubiera acuerdo para un recorte presupuestario o saliera votada cualquiera de las propuestas de los dos partidos con representación parlamentaria, como ya fue dicho, en todos los casos habría reducciones en las transferencias a las clases más vulnerables en los rubros de salud (tanto en prevención como en atención sanitaria), seguridad social y educación. La diferencia es que la poda demócrata es un poco menos directa y reparte con gastos militares y eliminación de exenciones impositivas a corporaciones y grandes fortunas. Pero como estas últimas propuestas no pasarán, la orientación general del ajuste va en el mismo sentido que el de la oposición. El gobierno obtendría el permiso para ampliar en 1,2 billón de dólares su endeudamiento y continuaría aplicando el presupuesto, pero en su versión recortada.
Si no obtuviera dicho permiso, entonces la administración federal debería empezar a ajustarse a pagar, día por día, con los fondos disponibles. Los cheques de la seguridad social, las transferencias al sistema de salud o los subsidios a los más pobres se darían en la medida del dinero “que entre”. La población dependiente de la prestación pública, en general, vería precarizado aún más su nivel de vida. La segura baja de la calificación de los bonos de la deuda estadounidense provocaría una suba en las tasas de interés, lo que afectaría a los consumidores usuarios de tarjetas de crédito (en Estados Unidos, la gran mayoría) y a los créditos en general para compras de bienes durables (autos, casas, electrodomésticos). La clase media vería resentida su demanda. Frente a este panorama, muchas decisiones de inversión serían revisadas, por prudencia, ante un mercado que ya será menos demandante de lo anteriormente imaginado. El mercado laboral pagará las consecuencias.
El actual estado de cosas en Estados Unidos y la postura de los grupos dominantes en el Congreso sugieren que otra vez el postulado de Naomi Klein se verifica en la práctica. Para la Argentina, quizá valga la pena sacar una conclusión más valiosa: las crisis pasadas pueden ser una experiencia útil para no repetirla, siempre que se saquen de ella las conclusiones correctas. Si se perdió la oportunidad tras el 2001, ahora Estados Unidos y Europa nos dan la posibilidad de volver a pensarlo con el beneficio de la distancia. Sería imperdonable dejarse acorralar por viejas muletillas y verdades absolutas a las que son tan afectos ciertos políticos y economistas, con tanta experiencia a la vista.

La verborrea acerca del tope de la deuda y el derroche del gobierno le cubre las espaldas a las corporaciones.

El estúpido imperio se impone y la nación pierde

por Saul Landau (tomado de Cubadebate)

30 Julio 2011  
“La razón por la que tenemos un Departamento de Defensa es para romper cosas y matar a gente. El problema que tenemos ahora es que gran parte del dinero no va a manos de los que  rompen cosas y matan a gente”. -Declaraciones del general retirado del Cuerpo de Infantería de Marina Arnold L. Punaro, miembro de la Junta de Negocios de la Defensa, a The Washington Post (21-7-11)
A medida que las mentes estratégicas de Washington averiguan cómo construir una nación en Afganistán mientras socavan la destruida infraestructura de este país, la cultura política norteamericana se dedica a debatir acerca del matrimonio gay y el tope de la deuda.
En su programa de radio, Rush Limbaugh aún subraya el segundo nombre del presidente: “Huuu-ssssein.” Millones ahogan una risita indignada por la “sutileza” de Rush y, por supuesto, siguen creyendo que el musulmán radical Obama nació en Kenia. Para Rush, Obama representa a la izquierda, una amenaza a nuestro derecho a escoger a nuestros propios médicos y quedarnos con todo nuestro dinero. Los círculos progresistas de izquierda han rebautizado a Obama: el Presidente Desilusión.
Al juzgar al presidente, ambos campos tienden a pasar por alto o confundir la fuerza de las instituciones imperiales en la formación de las políticas. Mientras que la disfunción se apodera de la gobernancia y las prioridades razonables, gran parte de la retórica anti-Obama que se escribe sigue siendo personal. “A él le fascinan los mejores y más brillantes individuos blancos”, escribió Frank Rich en la revista New York (3 de julio), como si en vez de eso Obama pudiera haber confrontado y cambiado a los blancos que son los pilares de las instituciones atrincheradas y de la cultura arraigada.
Obama heredó un legado imperial, el cual le ofrece opciones limitadas. Las reglas del Siglo Norteamericano de Henry Luce aún prevalecen en los supuestos de política y encuentran una voz pública en los editoriales de los principales periódicos. Dios, la Historia y el Destino escogieron a Estados Unidos para patrullar el mundo y definir el orden estratégico y económico, no importa cuán destruida esté la economía. Europa Occidental aún no se ha enfrentado a esos supuestos.
Mientras tomaba posesión del cargo en 2009, el legado cayó invisible pero pesadamente sobre los hombros de Obama: la permanente y enorme institución militar (casi $1 billón de dólares al año, contando la inteligencia, armas  nucleares y las guerras no presupuestadas) recibiría un apoyo sin cuestionamientos de parte de la mayoría congresional y los más importantes medios de prensa. Después de solo una década, Eisenhower observó y temió a este complejo militar-industrial y científico. Sesenta años después, casi todos los distritos congresionales tienen un proyecto “relacionado con la defensa”.
La retórica de campaña de Obama, un presidente en busca del “cambio”, no incluía enfrentarse al Establishment de unos 400 000 miembros de las fuerzas armadas en casi 800 bases a través del mundo (40 países), además de dos guerras simultáneas en curso. Adicionalmente, esta industria de “defensa” y sus derivados –las bases que mantienen a pueblos y pequeñas ciudades– está relacionada con millones de empleos.
¿Imaginó Obama que las crisis financieras de alguna forma provocarían que el Establishment al que le deben fidelidad abandonaría las reglas y los costos del imperio para que los pobres y la clase media del país sufran menos? Solo un hechicero cínico hubiera previsto que los republicanos decidirían impedir la reelección de Obama a cualquier precio. Escogieron el tope de la deuda como su tema principal para forzar una crisis, y así minimizar el desempleo, ejecuciones hipotecarias, personas sin vivienda y la pobreza en aumento que ha atacado a la población y obligado a estados y ciudades a cerrar escuelas, clínicas y bibliotecas –y permitir que se erosione la infraestructura.
Los miembros del propio partido de Obama en el Congreso se sumaron al lunático desfile republicano de horrores que es la mentira del tope de la deuda, la cual trasciende con mucho las necesidades básicas de la gente; por tanto, el Congreso debe reducir drásticamente o incluso eliminar programas sociales básicos.
A fines de la década de 1940, los liberales norteamericanos se convirtieron en importantes socios de lo que se convirtió en la economía permanente de guerra. En 2011, este monstruo ha crecido y devorado enormes porciones del tesoro nacional. El  no cuestionado presupuesto imperial -no olviden los acuerdos de libre comercio- se combina con el constante deseo corporativo de reducir el socialmente necesario costo de la fuerza de trabajo. La verborrea acerca del tope de la deuda y el derroche del gobierno le cubre las espaldas a las corporaciones.
Nadie oye a los directores generales quejarse de los costos del imperio, porque el imperio protege las inversiones y defiende medidas económicamente ventajosas. Sin embargo, el público recibe este mensaje en eufemismos que comienzan con palabras como “libre”, “seguridad”, “defensa” y “guerra al terrorismo”.
El Congreso no pregunta cómo recortar cientos de miles de millones dólares de las dudosas aventuras imperiales y con eso reconstruir la infraestructura. En su lugar, los republicanos (y algunos demócratas) llegan a un consenso para recortar los programas de Seguridad Social, Medicare y Medicaid que costó a los trabajadores norteamericanos esfuerzo y sangre para que se establecieran. Solo queda a debate la cantidad a reducir.
A medida que el consenso se fortalecía en contra de gravar con impuestos a los asquerosamente ricos EE.UU., según el World Factbook de la CIA, cayó al lugar 46 en mortalidad infantil, superado por Cuba
Una encuesta de la revista médica Lancet acerca de la mortalidad materna, descubrió que Albania se encontraba en el lugar 22, con 8,1 por 100 000 nacimientos vivos, mientras EE.UU. se situaba en el puesto 39 con 16,7.
Estas tasas en picada y el constante alto desempleo (más de 9%) debieran señalarle al presidente el camino hacia un plan lógico. En su lugar, Obama ha ignorado la invisible erosión de las normas norteamericanas y ha dedicado su retórica y su atención, como prometió en su campaña, en ganarse “corazones y mentes” -olvídense de la guerra- en Afganistán, el cual permanece en el lugar 181 (último) en la lista de indicadores básicos,  después de una década de buenas obras (ocupación), exactamente el mismo lugar que ocupaba cuando gobernaba el Talibán.
El imperio recibe su aumento anual de financiamiento para multiplicar la destrucción y la muerte -mientras que de manera simultánea multiplica los enemigos de EE.UU. en nombre de la lucha contra el terrorismo. El debate acerca de este tema es mínimo, mientras que fuego y azufre emergen para decidir cuánto más se reducirán los fondos que sostienen la infraestructura de la nación.
“Me recuerda a la Antigua Roma”, me dijo un amigo.  ”Bachman y Palin pudieran gobernar en vez de Nerón y Calígula”. Cómo alertó el ex rector de Harvard Derek Bok: “Si ustedes creen que la educación es cara, prueben con la ignorancia”.
El nuevo filme de Saul Landau, Por favor, que el verdadero terrorista se ponga de pie, está disponible en DVD por medio de cinemalibrestudio.com. Landau es miembro del Instituto para Estudios de Política.

viernes, 29 de julio de 2011

Hasta en Washington hay manifestaciones contra la guerra de la OTAN a Libia, y ¿¿para cuándo en EUROPA???

http://youtu.be/BMfxGM93FZg

¿Por qué no puede echarse para atrás una resolución de la ONU, como esta 1973, si se ha probado hasta el escándalo que la OTAN ha excedido sus atribuciones?

Horacio Labadie ha dejado un nuevo comentario sobre la entrada de este blog titulada "En Libia y por doquier: "La vasta mayoría del mundo ha sido traicionada": (la transcribo porque agrega datos y porque esa entrada sigue totalmente viguente; ahi se denuncia la ilegalidad de la resolución 1973 de la ONU que, con formas mafiosas, torció la voluntad de la mayoría de los miembros del Consejo de Seguridad, para constituirse en la excusa humanitaria que ya había sido premeditada, para lanzar y continuar los bombardeos contra un estado soberano que no amenazaba a ningún otro estado, y donde, como finalmente se probó, no hubo genocidio (acciones contra civiles desarmados) de parte del ejército libio. Todo , cuatro meses después de las falsas acusaciones contra el ejército libio sin que se haya presentado una prueba creíble de las supuestas acciones que provocaron esta fraudulenta resolucion 1973,  ha resultado ser, para cualquiera que tuviera dudas, una evidente campaña de falsas acusaciones contra un gobierno al que se quiere satanizar previamente y atacar después, en este caso por su petróleo, o en cualquier caso que se resiste a las determinaciones geopolíticas de dominio de las potencias occidentales.
Perdonen esta nota introductoria tan larga antes de transcribir el comentario de Horacio Labadie. La pregunta gigantesca, que debía llenar los títulares de todas las conciencias y que no veo que nadie se haga con el nivel de cosa que se cae de cajón, acción que es evidente que se debe hacer, es ¿por qué no puede echarse para atrás una resolución de la ONU, como esta 1973, si se ha probado hasta el escándalo que la OTAN ha excedido sus atribuciones y que los estados firmantes se han declarado en más de una oportunidad, engañados con la deriva guerrera que tomaron las potencias occidentales, amparándose en la lectura fraudulenta de una resolución votada fraudulentamente? ¿Por qué los estados no puede pedir una revisión y anulación, en todo caso, de esta resolución vergonzosa?

Ahora copio el comentario de Labadie a esa antigua y muy vigente nota de este blog:
"Estimado, transcribo el comienzo de tu extensa nota (extensa y rica):
'La principal diferencia, se dice, entre Irak y Libia es que aquella fue una guerra ilegal, totalmente ilegal, mientras que esta última no, porque se ha hecho a través del paraguas de una resolución de la ONU.'
Hay también una diferencia, que no sé si será la principal o no tanto. Y es que Ghadaffi es un líder mucho más popular dentro de su país, que lo que lo fué el ajusticiado Saddam Hussein.
Ghadaffi no persiguió ninguna de las religiones, ni tampoco se apoyó en ellas. Y tuvo la suerte de no tener minorías étnicas, entonces se libró de que las usaran en su contra.
Es rara esta guerra en Libia. Lo único que falta, es que Al Qaeda, pelee del lado de la nueva coalición.
Asusta la soledad internacional en que ha quedado Libia.
Los propios países africano, con reservas y con recomendaciones, votando a favor de la resolución de la ONU.
¿Nigeria? Será la misma NIgeria de la que estamos aburridos de oír desastres?
¿Sudáfrica? No hay como ser un buen esbirro inglés para votar algo así. En sudáfrica en menos de 5 años, ha desaparecido la justicia, la policía te roba (preguntar a los que fueron al Mundial), llevan más de 5.000 asesinatos a manos del Congreso Nacional Africano, y no sólo de blancos, sino de negros también.
Los países árabes monárquicos, ¡cómo no van a votar contra Libia, si el régimen libio había depuesto una monarquía!
Admirable lo de Alemania.
Rusia votando por la intervención, con "reservas". ¿Y Chechenia?
Y China, que ni fu ni fa.

SE VE QUE HAY MUCHO PETROLEO EN LIBIA".

lunes, 25 de julio de 2011

La doble moral de los medios neoliberales de occidente, y otros silencios

¡Cómo contrasta la actitud de los medios! ¿Cómo es de patética su sumisión, o más bien, su militancia neoliberal en cada hecho que describen, en cada punto de vista de propalan. Resulta que cuando se trataba de la huelga de hambre de un prisionero "político" en Cuba (que sin embargo había sido acusado y condenado por delitos penales comunes) publicaban todos los días en primera plana el seguimiento de su estado desesperado, su inminente muerte a la que apostaban todo su morbo y su mortuoria especulación política. Aquel preso cubano, finalmente, con toda clase de cuidados médicos y negociaciones, depuso su actitud y salió de su huelga de hambre. Grandes pérdidas para los medios significó esa decisión que los privó de una generalizada y monstruosa primera plana en todos los periódicos y televisiones del mundo, que ya tenían preparados en sus carpetas, adelantados diseños de la campaña anticubana que preveían hacer con pingües beneficios para su cruzada en defensa de la libertad del mercado.  En cambio, qué triste y qué solitario final el de este preso marroquí que hoy ha muerto, después de una huelga de hambre ¡de cinco meses!, de la que ninguno de estos medios de propaganda neoliberal se han hecho eco. La persistente afirmación del prisionero de raza de la policía española que clamó en todo tiempo de que era inocente, no les ha válido para intentar investigar su reclamo de inocencia. Sin embargo los medios adictos silenciaron su pedido de una nueva investigación, que le dieran al inmigrante discriminado que no contaba con el apoyo de los medios adictos al mercado, una opción de ejercer su defensa contra los jueces todopoderosos a los que no les tembló la mano para sostener su condena, sin dudar un momento, sin negociar, sin reabrir su caso, a pesar de 5 meses de huelga de hambre.
El diario El País publicó, creo que en solitario, esta noticia, lo cual, es verdad, muestra un mínimo de sorpresa frente a un caso, que por otro parte, no parece haber tenido eco ni en los medios alternativos.
No sea que por la presión de la evidencia de que los nazis están asaltando las conciencias en Europa, los medios tengan reticencia a mostrar que este es un caso que merece ser mirado con lupa, si uno se considera mínimamente democrático. Lo que sigue es un fragmento de la noticia publicada por El País
"Tohuami Hamdaoui, un preso marroquí de 41 años, murió ayer por la mañana en Teruel tras mantener una huelga de hambre durante los últimos cinco meses. Hamdaoui estaba condenado a 16 años de prisión por una agresión sexual a una menor y un robo con violencia, pero seguía clamando su inocencia y pedía que se revisase la condena que dictó la Audiencia Provincial de Alicante, donde sucedieron los hechos en 2003", dice hoy El País. ¿Y por qué cinco meses de silencio?

domingo, 24 de julio de 2011

Patrick Cockburn: la OTAN en Libia no ha aprendido las lecciones costosas de Afganistán

(traducción básica del google solo un poco corregida por marcos ávila)

Durante demasiado tiempo, los gobiernos occidentales han creído que podían ganar una victoria fácil mediante el uso de poder aéreo. Pero la experiencia demuestra que esto no es suficiente

Los ataques aéreos se están convirtiendo en los principales medios occidentales de controlar el Medio Oriente y Asia del Sur, sin poner soldados en el terreno donde podrían sufrir bajas políticamente perjudiciales. Gran Bretaña, Francia y los EE.UU. han utilizado sólo el poderío aéreo de la guerra en Libia en los últimos cuatro meses. Los EE.UU. también están intensificando su ofensiva aérea en Yemen, donde la CIA comenzó a operar aviones teledirigidos Predator junto a los militares de EE.UU., y continúa con sus ataques de aviones no tripulados en el noroeste de Pakistán. Incluso en Irak, donde los EE.UU. se supone está poniendo fin a su compromiso militar, sorprendió a la gente cerca de la sureña ciudad de Amara la semana pasada con el ataque de bombardeos.

El uso de las fuerzas aéreas como policías coloniales en la región tiene una larga y sangrienta historia, pero a menudo ha demostrado ser ineficaz en el largo plazo. El piloto de la OTAN que bombardeó Ain Zara al sur de Trípoli a principios de este mes, seguro que no sabía que su ataque se produjo casi exactamente 100 años después de que el objetivo mismo había sido alcanzado por dos bombas pequeñas se redujo en un avión italiano en 1911.
El ataque aéreo italiano fue el primero en la historia, llevado a cabo poco después de que Italia había invadido lo que más tarde se convirtió en Libia durante una de las muchas tallar-ups del Imperio Otomano. El primer vuelo de reconocimiento fue una ruta cerca de Benghazi, en octubre, y el 1 de noviembre Sub-teniente Giulio Gavotti se convirtió en el primer piloto que lanzó bombas. Él se abalanzó sobre un campamento turco en Ain Zara y lanzó cuatro granadas de 4.5 libras de una bolsa de cuero en su cabina. Los turcos protestaron que las bombas Gavotti había golpeado un hospital e hirieron a varios civiles.
Los pros y los contras se palpan rápidamente. No es que los ataques aéreos son totalmente inútiles. Yo estaba en Bagdad durante el bombardeo de EE.UU. en 1991 y nuevamente durante la operación Zorro del Desierto en 1998. Agachado en el suelo de mi habitación de hotel, mirando las columnas de fuego erupción alrededor de la ciudad. A cambio, fue una experiencia de prueba. Por otro lado, al ser bombardeado en el oeste de Beirut durante la guerra civil fue en algunos aspectos peor, ya que se prolongó durante más tiempo y fue completamente al azar. En Bagdad, cuando esperaba que los estadounidenses serían cuidadosos con sus objetivos, aunque sólo sea por razones de relaciones públicas, mi confianza fue gravemente mermada cuando mataron a unos 400 civiles en el refugio Amariya.
Es alarmante, las fuerzas aéreas a menudo exageran lo que pueden hacer. Siempre son menos precisos que los que dicen, su eficacia depende de la inteligencia táctica. Estos atentados funcionan mejor como un instrumento contundente contra la población civil, como un castigo generalizado. Contra soldados bien preparados, como las guerrillas de Hezbolá, son mucho menos eficaces. La aventura desastrosa de Israel en Líbano probablemente fue clasificada como la guerra más mal pensada de la historia del aire, hasta este año cuando Francia y Gran Bretaña decidieron aliarse a una milicia de entusiastas pero mal entrenados rebeldes para derrocar al coronel Muammar Gaddafi.
No empezó de esta manera. Cuando los aviones de la OTAN atacaron por primera vez, fue con el objetivo de prevenir los tanques de Gadafi para avanzar por el camino de Ajdabiya en manos de los rebeldes Benghazi. Los ataques fueron efectivos, pero el objetivo rápidamente cambió para convertirse en una campaña abierta para derrocar a Gaddafi en la que la OTAN proporciona apoyo aéreo a las milicias rebeldes. Muy similar a las incursiones imperiales francesas en África Occidental. Es extraordinario que esta intervención extranjera abierta ha sido tan poco criticada en Gran Bretaña.
Los rebeldes siempre han sido más débiles que lo que sus patrocinadores de la OTAN pretendían. Podrán reconocerlos como el legítimo gobierno de Libia, pero es evidente que en eso no están de acuerdo todos los libios. El Grupo Internacional de Crisis, altamente informado, dice que un elemento clave "en la capacidad de Gadafi a aferrarse a la mayor parte del oeste [de Libia] ha sido la deserción limitada hasta la fecha entre las principales tribus que tradicionalmente se han aliado con el régimen". En realidad, en un mundo dividido, la OTAN se ha unido a uno de los lados en una guerra civil en Libia, tal como lo hizo anteriormente en Afganistán, y los EE.UU. y Gran Bretaña habían hecho en Irak.
En las guerras de aire, la primera semana suele ser la mejor. Al final de la misma, los blancos más fáciles que han sido destruidos y el enemigo ha aprendido a ocultar, dispersar sus fuerzas y evitar presentarse como un objetivo. En el caso de Libia, las tropas pro-Gaddafi comenzaron a utilizar el mismo beat-up pick-up con una ametralladora pesada en la espalda como lo había hecho los rebeldes. Varias veces la OTAN atacó a sus propios aliados con resultados devastadores.
Hasta ahora, en Libia no ha habido un asesinato en masa de un gran número de civiles en un ataque aéreo. Cuando esto sucedió con el refugio Amariya en Bagdad en 1991, la selección de objetivos en la ciudad tuvo que ser confirmada por el jefe del Estado Mayor, Colin Powell, y los ataques aéreos sobre la capital cesaron en gran medida. De la Fuerza Aérea se apunta generalmente a la exactitud de sus maravillosas armas inteligentes, señalando objetivos pequeños, pero rara vez se explica que esto depende de la inteligencia correcta.
La inteligencia es a menudo muy frágil. Yo estaba en Herat en el oeste de Afganistán en 2009, cuando aviones de EE.UU. mataron a unas 147 personas en tres aldeas en el sur. Las bombas habían roto las casas de ladrillos de barro y los cuerpos de los muertos habían sido despedazados por la explosión. ¿Qué había ocurrido en estos pueblos, que estaban profundamente en territorio talibán, fue que algunos vehículos de EE.UU. y afganas habían caído en una emboscada. Soldados asustados y desconcertados había pedido apoyo aéreo. Al grito de "Muerte a América" y "Muerte al Gobierno", enfureció a los supervivientes manejaron un tractor tirando de un remolque repleto de partes de los cuerpos a la oficina del gobernador en la ciudad de Farah.
La respuesta del Secretario de Defensa de EE.UU., Robert Gates, a todo esto fue afirmar que los talibanes habían corrido por las aldeas lanzando granadas. Las mentiras de este tipo fueron muy diseñadas para consumo de los EE.UU., pero enfurecieron a los afganos que podían ver los cráteres de bombas de profundidad en sus televisores. ¿El fin de la campaña aérea de Libia en un desastre similar? La tolerancia política en el Reino Unido y los EE.UU. para con la guerra de Libia es poco profunda y sería fatalmente minada por cualquier matanza accidental de civiles.
Desde el momento, hace 100 años, cuando el Sub-Teniente Gavotti tiró sus granadas en el lado de la cabina, los gobiernos occidentales han sido atraídos por la idea de que pueden ganar las guerras por el poder aéreo. La victoria sería barato sin comprometer tropas de tierra. Sólo al final del día no resulta esto evidente, como lo estamos viendo en Libia, que el poder aéreo por sí solo casi nunca gana las guerras.

viernes, 22 de julio de 2011

El ataque de Prensa y de la OTAN en Libia

por Alexander Cockburn y Patrick Cockburn
(trad. Marcos Ávila)

¿Podría ser que la cobertura de prensa de la embestida de Libia de la OTAN es en realidad peor que la información sobre la OTAN en sus ataques contra la ex Yugoslavia en la década de 1990, o en Irak en el período previo a la invasión de 2003 por los EE.UU. y sus socios de la coalición?

Una acusación muy fuerte de ser cierta.

En el caso de las dos intervenciones anteriores de la OTAN, los debates pro y en contra fueron acompañados por numerosas investigaciones periodísticas y oficiales o semioficiales, la mayoría de ellos descaradamente partidistas, pero que ofrecen algunas afirmaciones de fondo sobre temas tales como los crímenes de guerra, armas de destrucción masiva la destrucción,  los motivos de los atacantes, y las cuestiones afines.

Marca el contraste con la intervención a Libia. En menos de un mes, desde mediados de febrero hasta mediados de marzo, hemos pasado de acusaciones vagas de los supuestos del  "genocidio" o "crímenes contra la humanidad"  de Gadafi a dos votaciones por separado en el Consejo de Seguridad de la ONU, lo que permitió una misión de la OTAN de establecer una "no-fly" zona para proteger a los civiles.

En el momento en que la Resolución nº1973 fue votada el 17 de marzo, Francia ya había reconocido formalmente el comité rebelde de Bengasi como el gobierno legítimo de Libia. A finales de mayo, ya estaba siendo declarado abiertamente por altos cargos de los gobiernos de la OTAN que "el cambio de régimen" era el objetivo pertinente y el desalojo de Gaddafi una condición sine qua non de la misión.

Además, a finales de mayo, se hizo evidente que las capacidades de los rebeldes militares fueron modestas en el extremo, y que el desalojo Ghadafi no iba a ser asunto de una noche según lo previsto en las capitales occidentales, y también que los bombardeos de la OTAN no estaban teniendo los efectos pertinentes.

La presentación de informes , tanto a través de la prensa corporativa como en muchos casos de la supuestamente "progresista", ha sido lamentable. En la crucial fecha desde el 15 de febrero  hasta marzo 17, no hubo esfuerzos serios para investigar las acusaciones contra Ghadafi, tanto al nivel del Consejo de Seguridad como por los directores de la OTAN, ni de Obama ni de la Clinton, ni del primer en el Reino Unido Cameron  o del presidente Sarkozy y su ministro de Relaciones Exteriores.

La vaguedad increíble de noticias de este - o cualquier - tema que sale de Libia ha sido notable. En este caso, recordemos que tenemos un régimen acusado en la Resolución 1973 por "ataques generalizados y sistemáticos ... contra la población civil [que] pueden constituir crímenes de lesa humanidad". Tenemos un equipo de prensa y los insurgentes listos y ansiosos que no han podido reportar nada en detrimento del régimen de Gaddafi.

Sin embargo, desde mediados de febrero la presentación de informes de Libia ha tenido una notable falta de documentación de persuasión de las carnicerías o los abusos en consonancia con el lenguaje prodigado en la conducta presunta del régimen. Una y otra vez la lectura frases vagas como "mataron a miles de mercenarios de Gadafi" o Gaddafi "masacrar a su propia gente", publicados sin el menor esfuerzo para proporcionar evidencia de información que las apoyara. Fue la segunda denuncia de las masacres que llevó tanto la cobertura de noticias y actividades de las Naciones Unidas - en particular en la etapa inicial, cuando la Resolución 1970 fue adoptada, exigiendo sanciones y la remisión de círculo más cercano de Gadafi a la Corte Penal Internacional (CPI).

Informes de prensa a mediados de marzo, como los de los periodistas de la cadena de noticias McClatchy, Jonathan Landay, Warren Strobel y bengalí Shashank, no contenían nada parecido a afirmaciones como "crimen contra la humanidad", que era la alegación contenida en la denuncia de la Resolución 1973. Sin embargo, el 23 de febrero el bombardeo de propaganda fue fulminante, con la Clinton denunciando a Gaddafi con la frase de Reagan, "perro loco de Oriente Medio" exhumada como la mejor forma de describir al líder libio.

El comisionado de la ONU para los derechos humanos, Navi Pillay, comenzó a denunciar al gobierno libio ya en febrero 18, el Secretario General Ban Ki-moon, se unió a Pillay el 21 de febrero. El Centro de Noticias de la ONU informó que Ban estaba "indignado por las informaciones de prensa que las autoridades libias han estado disparando contra los manifestantes de aviones de combate y helicópteros" (la cursiva es nuestra). En estos primeros días, no hubo alguien que representara al gobierno de Libia al se le permitiera hablar ante el Consejo. Eran solo desertores del gobierno, a los que se les concedió el uso de la palabra.

Ahora, recordemos que el 10 de marzo el presidente francés, Sarkozy, un jugador importante en la coalición de la OTAN de los dispuestos en contra de Libia, declaró el Consejo Nacional de Transición de Libia era el único representante legítimo del pueblo libio. Por lo tanto, Gaddafi se enfrentaba a una insurrección armada formal - no es un movimiento de protesta exigiendo la "democracia" - dirigida por una entidad oscura con sede en Bengasi, uno de cuyas más diligentes empresas fue la creación de un "banco central". Siete días más tarde, la Resolución 1973 dejó en claro que los intentos de suprimir la insurrección provocarían la intervención de la OTAN.

El carácter político y los orígenes de la dirigencia rebelde y sus partidarios recibieron una atención fugaz en los medios. Temas como la rivalidad entre las compañías petroleras francesas e italianas, o la entrada de otras grandes petroleras internacionales, y los principales bancos de EE.UU. y las instituciones financieras fueron tocados muy rara vez.

La cobertura de cualquier lucha era a menudo risible. La prensa en Benghazi alentaba escaramuzas menores que afectaban a un tanque o dos, o algunos vehículos armados, como los compromisos fuertes a describir.

Las noticias sugieren la guerra de movimientos en la escala de los dramas épicos de la saliente de Kursk y la batalla de Stalingrado en la Segunda Guerra Mundial. De hecho, los poderosos ejércitos contendientes a lo largo de la autopista oeste de Benghazi que se funden en las gradas en un partido de béisbol de la universidad.

La "zona de no vuelo" a permitido 12,000 saludadas de la OTAN. Como con cualquier otro atentado, murieron civiles. Desde el inicio de operaciones de la OTAN, ha habido un total de 12.887 salidas, incluyendo 4.850 bombardeos, se llevaron a cabo hasta el 27 de junio.

Un equipo de médicos rusos, escribió al presidente de la Federación de Rusia, Dmitry Medvedev, de la siguiente manera:

"Hoy, 24 de marzo de 2011, aviones de la OTAN y los EE.UU. durante toda la noche y la mañana bombardearon en las afueras de Trípoli - Tajhura (donde, en particular, es el Centro de Investigación Nuclear de Libia) de la defensa aérea y las instalaciones de la Fuerza Aérea en Tajhura fueron destruidas de nuevo en. los primeros 2 días de huelgas y de las instalaciones militares más activo en la ciudad se mantuvo, pero en la actualidad el objetivo de los bombardeos son los cuarteles del ejército libio, alrededor del cual se hallan zonas residenciales densamente pobladas, y, al lado de él, el más grande de los Centros del Corazón de Libia. civiles y los médicos no podían entender que el más común de los barrios residenciales fuera a empezar a destruírse, por lo que ninguno de los residentes o pacientes del hospital fue evacuado.

"Las bombas y los cohetes impactaron casas residenciales y cayeron cerca del hospital. El vidrio del edificio Centro Cardíaco estaba rota, y en la construcción de la sala de maternidad para las mujeres embarazadas con enfermedades del corazón una pared se derrumbó y parte del techo. Esto dio lugar a diez abortos involuntarios por el que los bebés murieron, las mujeres se encuentran en cuidados intensivos, los médicos están luchando por sus vidas. Nuestros colegas y nosotros estamos trabajando siete días a la semana, para salvar a la gente. Esta es una consecuencia directa de las bombas que están cayendo y misiles en edificios residenciales, lo que resulta en decenas de muertos y heridos, los cuales son operados y revisados ahora por nuestros médicos. Un gran número de heridos y muertos, como en la actualidad, no se produjo durante el total de todos los disturbios en Libia. Y esto se llama la "protección" población civil? "

El Gobierno libio dice que se está preparando un informe que detalle el terrorismo de la OTAN y los crímenes contra la población civil, basada en el bombardeo de objetivos civiles 294, que mataron e hirieron a un total de 6.121 en los primeros cien días de la OTAN de objetivos.

Con la intervención de Libia, todo está fuera de proporción. Gaddafi es apenas el colmo de la monstruosidad evocado por Obama o Hillary Clinton o Sarkozy. En cuatro décadas, los libios se levantaron de entre los más miserables de África a una considerable altura considerable en términos de servicios sociales. En un informe detallado bastante reciente ("La situación de los niños y las mujeres en Libia", UNICEF Oriente Medio y Norte de África de la Oficina Regional, noviembre de 2010), el UNICEF señaló que Libia tenía importantes logros socioeconómicos en su haber. En 2009, disfrutó de:

· Una tasa de crecimiento boyante, con un PIB que pasó de $ 27,3 mil millones en 1998 a $ 93,2 mil millones en 2009, según el Banco Mundial;

· Alta ingreso per cápita (estimado por el Banco Mundial en $ 16,430), las altas tasas de alfabetización (95 por ciento de los varones y el 78 por ciento de las mujeres, de quince años y más);

· Alta esperanza de vida al nacer (74 años en general y 77 para las mujeres y 72 para los hombres);

· Y una clasificación como consecuencia de 55 entre 182 países en términos generales de "Desarrollo Humano".

En cuanto a la distribución de los ingresos petroleros sería instructivo comparar registros de Libia a las de otras naciones productoras de petróleo. En cuanto a profundidades demoníacas, es Gaddafi un Mobutu, Bokassa, Saddam, o cualquier presidente de los EE.UU.? Por supuesto que no. Las manos del presidente Obama están manchadas con más sangre y sufrimiento. Por desgracia, el fracaso para hacer cualquier corrección del informe se extendió mucho en el sector progresista / izquierda. Lo sustancial de lo que pasaba por la izquierda en América era el éxtasis por la intervención - una "buena" por fin. - Y la vacía "carta a la izquierda" del profesor Juan Cole fue aprobada con entusiasmo de mano en mano y se replicó en casi todos los sitios web progresistas. Antes en 2005, Cole estuvo aconsejando un uso mayor de "fuerzas especiales y la fuerza aérea en Irak.

La supuesta masacre de Gadafi de su propio pueblo, y la supuesta orden de las violaciones en masa, bases para justificar la cruzada intervencionista y las resoluciones del Consejo de Seguridad, se cubren con el visto bueno de la Corte Penal Internacional. Estos cargos se han reciclado hasta la saciedad por la prensa, sin ningún intento serio de verificación.

A mediados y finales de junio, organizaciones de derechos humanos ponen en duda las denuncias de violación en masa y otros abusos perpetrados por las fuerzas leales a Gaddafi. Una investigación realizada por Amnistía Internacional no pudo encontrar evidencia de estas violaciones de los derechos humanos y en muchos casos han sido desacreditadas o puesto dudas sobre ellas. También se encontraron indicios de que, en varias ocasiones, a los rebeldes en Benghazi parecían haber efectuado, a sabiendas, declaraciones falsas o pruebas fabricadas.

Los resultados obtenidos por los investigadores fueron fuertemente en desacuerdo con las opiniones del fiscal de la Corte Penal Internacional, Luis Moreno-Ocampo, quien dijo en una conferencia de prensa que "tenemos información de que existía una política de violación en Libia a los que estaban en contra de la gobierno. Aparentemente él [el coronel Gaddafi] la utiliza para castigar a la gente. "

Donatella Rovera, asesora de respuesta a la crisis de Amnistía, que se encontraba en Libia tres meses antes del inicio de la sublevación, dijo Patrick Cockburn a finales de junio que "no hemos encontrado ninguna prueba ni una sola víctima de una violación, o un médico que sabía que alguien está siendo violada. " Hizo hincapié en esto no prueba que la violación masiva no se produjera, pero no hay pruebas que demuestran que si se hicieron. Liesel Gerntholtz, la cabeza de los derechos de las mujeres en Human Rights Watch, que también investigó la acusación de violación en grupo, dijo: "No hemos sido capaces de encontrar las pruebas."

En un caso, dos soldados pro-Gaddafi  capturados presentados a los medios internacionales por los rebeldes afirmaron que sus oficiales, y más tarde ellos mismos, había violado a una familia con cuatro hijas. La Sra. Rovera dice que cuando ella y un colega, ambos con fluidez en árabe, entrevistaron a los dos detenidos, de 17 años uno y 21 otro, solos y en habitaciones separadas, cambiaron sus historias y se entregaron a diferentes relatos de lo que había sucedido. "Los dos dijeron que no habían participado en la violación y escuchado al respecto", dijo. "Se contaban historias diferentes acerca de si o no las manos de las chicas estaban atadas, si sus padres estaban presentes, y sobre cómo estaban vestidos."

Al parecer, la prueba más contundente de la violación en masa que parecía provenir de un psicólogo de Libia, el Dr. Seham Sergewa, que dice que distribuye 70.000 cuestionarios en las áreas controladas por los rebeldes ya lo largo de la frontera tunecina, de los cuales más de 60.000 fueron devueltos. Alrededor de 259 mujeres voluntarias que habían sido violadas, de los cuales el Dr. Sergewa dijo que entrevistó a 140 víctimas.

Pregunta de Diana Eltahawy, especialista de Amnistía Internacional sobre Libia, si sería posible entrevistar a alguna de estas mujeres, el Dr. Sergewa respondió que "había perdido contacto con ellas", y no pudo aportar pruebas documentales.

La acusación de que el Viagra se había distribuido a las tropas de Gadafi para animarles a la violación de las mujeres en las zonas rebeldes fue lanzada por primera vez en marzo, luego de la OTAN había destruido tanques avanzando en Benghazi. La Sra. Rovera dice que los rebeldes al tratar con los medios extranjeros en Bengasi comenzaron a mostrar los paquetes de Viagra, los periodistas alegando que procedían de los tanques incendiados, aunque no está claro por qué los paquetes no estaban carbonizados.

Una carga de de profundidad sobre esto de las  violaciones vino de Eman al-Obeidy que irrumpió en un hotel en Trípoli el 26 de marzo, para decirle a los periodistas que había sido violada antes de ser arrastrada por los servicios de seguridad libios.

Los rebeldes han acusado repetidamente que tropas mercenarias de África Central y Occidental se han utilizado en su contra. La investigación de Amnistía dice que no había ninguna evidencia de esto. "Los que se muestran a los periodistas como mercenarios extranjeros fueron posteriormente liberados en silencio", dice la señora Rovera. "La mayoría eran inmigrantes subsaharianos que trabajan en Libia sin documentos." Otros no tuvieron tanta suerte y fueron linchados o ejecutados. La Sra. Rovera encontró dos cuerpos de los migrantes en la morgue de Benghazi, y otros fueron objeto de dumping en las afueras de la ciudad. Ella dice: "Los políticos siguieron hablando de mercenarios, que la opinión pública inflama, y el mito ha continuado, ya que fueron puestos en libertad sin publicidad."

Una historia, a la que se le dio crédito en los medios de comunicación extranjeros desde el principio en Benghazi, fue que entre ocho y diez soldados del gobierno que se negaron a disparar manifestantes fueron ejecutados por su propio lado. Sus cuerpos aparecieron en la TV. Pero la señora Rovera dice que hay una fuerte evidencia de una explicación diferente. Ella dice que video amateur los muestra con vida después de haber sido capturados, lo que sugiere que fueron los rebeldes los que les dieron muerte.

La intervención de la OTAN comenzó el 19 de marzo, con ataques aéreos para "proteger" la gente de Bengasi de la matanza por el avance de las tropas pro-Gaddafi. No hay duda de que los civiles esperaban ser asesinados tras recibir amenazas de venganza de parte Gadafi. Durante los primeros días del levantamiento en el este de Libia, las fuerzas de seguridad mataron a tiros a los manifestantes y personas que asisten a sus funerales, pero no hay ninguna prueba de matanza masiva de civiles.

La mayoría de los combates durante los primeros días del levantamiento fueron en Benghazi, donde 100 110 personas perdieron la vida, y en la ciudad de Baida hacia el este, donde el 59 y 64 años murieron, dice Amnistía. La mayoría de estos fueron probablemente manifestantes, aunque algunos hayan obtenido armas. No hay evidencia de que aeronaves o pesados cañones antiaéreos se utilizaran contra la multitud. Cartuchos usados recogidos después de que manifestantes fueron asesinados provenían de Kalashnikovs o armas de similares calibres.

Las conclusiones de Amnistía confirman un informe reciente del International Crisis Group, el cual encontró que mientras que el régimen de Gaddafi tenía una historia de brutal represión de los opositores, no era cuestión de "genocidio".

El informe añade que "la cobertura de gran parte de los medios occidentales desde el primer momento presentó una visión muy parcial de la lógica de los acontecimientos, representando el movimiento de protesta como totalmente pacífico y en repetidas ocasiones, lo que sugiere que las fuerzas de seguridad del régimen fueron inexplicablemente a masacrar a manifestantes desarmados que se presentaron sin protección al desafío ".

Con tantos países limítrofes, los periodistas se han congregado en Benghazi, en Libia, a la que se puede llegar desde Egipto sin un visado. Por otra parte se van a Trípoli, donde el gobierno permite a un cuerpo de prensa vigilar cuidadosamente para operar bajo una estricta supervisión. Al llegar a estas dos ciudades, las formas en que los periodistas informan difieren considerablemente. Todo el mundo durante la presentación de informes de Trípoli, expresa su escepticismo comprensible sobre lo que el gobierno trata de mostrar en lo que respecta a las bajas civiles causadas por ataques aéreos de la OTAN o manifestaciones de apoyo a Gaddafi. Por el contrario, el cuerpo de prensa extranjera en Benghazi, capital del territorio bajo control rebelde, muestra una sorprendente credulidad hacia historias más sutiles pero igualmente auto propagandísticas del gobierno rebelde o de sus simpatizantes.

Los insurgentes de Libia eran expertos en tratar con la prensa desde una etapa temprana, y esto incluía propaganda hábil para poner la culpa de asesinatos sin resolver en el otro lado. Es una debilidad de los periodistas que se de amplia difusión a historias de atrocidades, cuyas evidencias pueden haber sido muy inestables cuando se revelaron por primera vez. Sin contar las que resultan falsas o exageradas.

Es todo el crédito de Amnistía Internacional y Human Rights Watch que han tomado una actitud escéptica ante las atrocidades de que se acusa al gobierno de Libia, hasta que se demuestre.

No hay nada particularmente sorprendente acerca de que los rebeldes en Benghazi estén inventando cosas o presentando testigos dudosos de crímenes de Gaddafi. Es comprensible que se utilice la propaganda como arma de guerra. Pero sí muestran la ingenuidad por parte de la política exterior del Cuerpo de Prensa, que casi todo el mundo simpatice con los rebeldes, en la medida en que se tragan todas las historias de atrocidades alimentadas por ellos.

La sola masacre por parte del régimen de Gaddafi, que involucra a cientos de víctimas, que hasta ahora está bien documentada es la matanza de la prisión de Abu Salim, en Trípoli en 1996, cuando más de 1.200 presos murieron, según un testigo creíble que sobrevivió.

Los frentes de batalla son siempre inundados de rumores de inminente masacre o la violación, que se extenden rápidamente entre la gente aterrorizada que pueden ser las futuras víctimas. Comprensiblemente, no quieren esperar para ver cómo esas historias se vuelven verdad. A principios de este año, Patrick Cockburn estaba en Ajdabiyah, una ciudad de primera línea de una hora y media en coche al sur de Benghazi, cuando vio un montón de coches de refugiados que huyen con pánico por la carretera. Acababan de escuchar un informe totalmente falso a través de Al Jazeera en árabe que las fuerzas pro-Gaddafi habían sido derribadas.

Del mismo modo, al-Jazeera estaba produciendo informes no corroborados de los hospitales de ser atacados, los bancos de sangre destruidos, mujeres violadas, y ejecutados los heridos. Un símbolo de los informes miserables de lo que cada vez se asemeja a un viejo estilo colonial romper-y-agarrar la guerra es que el edificio en el centro histórico de Bengasi fuera del cual los rebeldes iniciaron sus manifestaciones es, de hecho, el cuartel general de Al-Jazeera y por lo tanto la razón de por qué las manifestaciones se celebran allí. Contrastemos esto con la negativa, según informó Franklin Cordero en el sitio web de CounterPunch, de algunos periodistas occidentales para asistir el 1 de julio a manifestación en Trípoli, porque tenían miedo de un peligro potencial o porque sus oficinas en Estados Unidos sugirieron que se mantengan alejado "para no legitimar la reunión. "CP

Este informe se basa en el trabajo realizado a través de las ocho semanas por ambos escritores, algunos de los cuales se ha ofrecido en nuestro sitio web CounterPunch.

jueves, 21 de julio de 2011

Los santos eran casi todos ricos, como ahora los presidentes y altos funcionarios del mundo / por Vincenç Navarro



VICENÇ NAVARRO
Catedrático de Ciencias Políticas y Políticas Públicas de la Universidad Pompeu Fabra
Ilustración de Mikel Jaso
Debo aclarar desde un principio que no soy creyente, es decir, no estoy dotado de lo que los creyentes llaman “el don de la fe”. Pertenezco, sin embargo, a una familia y a una tradición que siempre hizo distinción entre las religiones por un lado y las instituciones que las reproducen, como la Iglesia, por otro. Mis padres me enseñaron a respetar las religiones y a los creyentes, pero no siempre a las autoridades eclesiásticas que dirigen las iglesias, las cuales, como instituciones humanas, configuran las religiones y sus creencias para optimizar los intereses que las sustentan. Un ejemplo de ello es la composición del colectivo de santos y beatos de la religión católica, nombrados a dedo por las máximas autoridades de la Iglesia católica. El estudio de a quién se nombra santo, cuándo, cómo y por qué dice mucho sobre tal institución y sus intereses durante sus 20 siglos de existencia. Un estudio de enorme interés (sobre todo para los estudiosos de cómo se genera y reproduce el poder) es analizar cómo este es percibido por los dirigentes de la Iglesia católica y cuáles son los objetivos de nombrar a alguien santo y su relación con tal poder.
En teoría, el nombramiento de los santos tiene como objetivo establecer puntos de referencia, es decir, modelos para orientar a los creyentes católicos, siendo parte de las enseñanzas de la jerarquía católica honrarlos y celebrarlos. Son, pues, individuos ejemplares que deberían inspirar a los feligreses de la Iglesia. Pero ser “ejemplares” también implica que sepamos de qué son ejemplares y con qué objetivo lo son. Y ello queda muy explicitado al analizar el contexto político que configuró en gran manera la decisión de otorgar la santidad a unas personas versus otras.
Estas reflexiones vienen a raíz de la lectura de un artículo “Roman Catholic Sainthood and Social Status: a Statistical and Analytical Study” (La santidad romana católica y el estatus social: un estudio estadístico y analítico), publicado por dos historiadores de la Universidad de Rochester (EEUU), Katherine y Charles H. George, en la revista The Journal of Religion. Este artículo obtuvo gran parte de sus datos de la detallada biografía de los santos de Alban Butler, complementada por los trabajos de Herbert Thurston y otros, todo ello publicado en doce volúmenes.
Lo que los investigadores del artículo deseaban conocer era la clase social o el estatus social de los 2.494 santos sobre los cuales existe suficiente biografía publicada. Ni que decir tiene que hay problemas metodológicos importantes cuando se intenta comparar clase social o estatus a lo largo de la historia desde el establecimiento de la Iglesia católica. Pero los autores del artículo hacen un trabajo creíble y riguroso, señalando en cada época aquellos sectores de la población que correspondían a las clases altas (nobleza en la época feudal y burguesía en la época capitalista, por ejemplo), a las clases de estatus medios y a las clases populares, de estatus bajos. Pues bien, tales autores encontraron que la gran mayoría (1.950 del total de 2.494, es decir, un 78%) pertenecía a los estatus altos, que definen como clase alta; 422 (un 17%) de estatus medio, y sólo 122 (un 5%) procedían de las clases populares. Señalan los autores del estudio que las clases altas, de estatus alto, constituían sólo el 5% de la población de los países estudiados; las clases de estatus medios el 10-15%; y las clases populares, la gran mayoría (del 80 al 85%). Los seres ejemplares para la Iglesia católica eran, pues, en su mayoría, personajes de las clases dirigentes, y ello a pesar del famoso dicho en la Biblia de que “será más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja a que un rico entre en el Reino de los Cielos”. Naturalmente que no todas las clases dirigentes durante la historia de los últimos 20 siglos eran las más ricas, pero sí que es una suposición razonable asumir que, si no lo eran, al menos estaban a su servicio.
Lo que es incluso más interesante es ver la composición social de los santos según el siglo en que fueron nombrados. Y es sólo en el primer siglo de la cristiandad cuando santos pertenecientes a los estatus altos no son la mayoría. En este primer siglo, las personas de estatus medio y popular tenían más posibilidades de ser nombrados santos. No así a partir del segundo siglo. Desde entonces, el dominio de santos entre las clases altas es casi absoluto, alcanzando su máxima expresión durante la Edad Media, periodo en el que la Iglesia adquirió más poder y riqueza. En realidad, la santidad estaba relacionada frecuentemente con la donación de riquezas a la Iglesia, hasta el punto de que familias enteras eran nombradas santas. Así, el noble Dagobert fue nombrado santo, como también lo fueron su madre, su abuela y sus cuatro hijos. El noble Dagobert y sus familiares donaron todas sus propiedades, al morirse, a la Iglesia. Este dominio de santos de clase alta disminuyó algo en los siglos XVIII, XIX y XX, en que aparecieron otros grupos de los sectores de estatus medio que la Iglesia quería captar. Los santos entre las clases populares, sin embargo, continuaron siendo una minoría.
En España, además del estatus, ha sido determinante, para conceder santidad, su ubicación dentro de las coordenadas del poder. Así, el nombramiento de santo a Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei y defensor del golpe militar y de la dictadura que estableció, así como de los sacerdotes asesinados por grupos descontrolados (y con la oposición del Gobierno de la República), sin jamás santificar a los sacerdotes vascos asesinados por el Estado golpista, es un indicador claro de la identificación de la Iglesia con las fuerzas antidemocráticas y reaccionarias de España en el poder, de las cuales la Iglesia fue su apoyo ideológico central. Y sus dirigentes están orgullosos de ello.

lunes, 18 de julio de 2011

Los objetivos estratégicos del bombardeo a Libia

La guerra contra Libia es una catástrofe económica para África y para Europa


Entre los objetivos de la guerra contra Libia se cuentan detener el desarrollo de África, permitir la instalación de la base militar del AfriCom estadounidense en Cirenaica y emprender la explotación colonialista del continente africano en beneficio de Estados Unidos. Para una mejor comprensión de esos objetivos, que nunca se mencionan, la Red Voltaire entrevista a Mohammed Siala, ministro de Cooperación y administrador del fondo soberano de Libia.
Red Voltaire | Trípoli (Libia)
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Mohammed Siala recibe a los investigadores de la Red Voltaire
© Mahdi Darius Nazemroaya / Red Voltaire
Red Voltaire: Libia es un país rico en gas y petróleo. Este país creó la Autoridad Libia de Inversiones, con un capital de 70 000 millones de dólares. ¿Cómo utilizan ustedes ese capital?
Mohammed Siala: Es cierto que disponemos de importantes recursos, pero no son renovables. Así que creamos la Autoridad Libia de Inversiones para proteger las riquezas de las futuras generaciones, como por ejemplo los noruegos. Sin embargo, dedicamos parte de esos fondos al desarrollo de África. Eso significa que hemos invertido más de 6 000 millones de dólares en [la realización de] acciones [a favor del] desarrollo del continente [africano] en sectores como la agricultura, el turismo, el comercio, la minería, etc.
El resto de los fondos lo hemos invertido en diferentes sectores, en diferentes países, en diferentes monedas, en todas partes, incluso en Estados Unidos y en Alemania, lo cual, desgraciadamente, les ha permitido congelar parte de esos fondos.
Red Voltaire: ¿Cómo se aplica ese congelamiento en el plano técnico?
Mohammed Siala: El congelamiento de los fondos se rige por las leyes bancarias de los países donde se encuentran. La regla es que congelan nuestras cuentas, pero podemos lograr que [los fondos] sean liberados si llevamos el litigio ante un Comité de Reclamaciones y podemos probar que estaban destinados a determinados fines. Por ejemplo, en este momento acabo de argumentar el descongelamiento de fondos destinados al otorgamiento de becas a los 1 200 estudiantes que hemos enviado a Malasia. Estamos tratando de hacer lo mismo con todo lo que tiene que ver con las subvenciones sociales o con los gastos de hospitalización de nuestros ciudadanos en el extranjero.
Algunos países nos autorizan a utilizar fondos para la compra de alimentos o de medicamentos. En principio, estamos en nuestro derecho, pero muchos se niegan a descongelar las sumas necesarias o demoran el proceso. Por ejemplo, en Italia, el Estado nos niega toda forma de utilización de nuestros fondos. En Alemania, el Estado nos autoriza su uso con fines humanitarios, pero algunos bancos se niegan a descongelar los fondos necesarios. Las interpretaciones de la resolución son completamente diferentes según los Estados. Nosotros exigimos una regla clara: lo que se permite está autorizado y lo que no, está prohibido. Por el momento, la interpretación es política y se está imponiendo la fuerza en lugar del derecho.
Red Voltaire: ¿Es el único problema que están enfrentando ustedes para garantizar el aprovisionamiento?
Mohammed Siala: También estamos enfrentando el bloqueo marítimo que la OTAN ha implementado y que carece de toda base legal. Impiden la llegada de nuestros suministros o los retrasan, incluyendo los envíos de alimentos. Se esfuerzan ante todo por impedir que obtengamos gasolina, aunque eso no está estipulado en las resoluciones de la ONU.
Hace un mes que tenemos un barco cargado de petróleo en espera en Malta. Por cada barco nos cuestionan la doble utilidad de lo que transporta. La gasolina es para los vehículos civiles, pero ellos dicen que también puede servir para los vehículos del ejército. Nosotros les respondemos que no tienen derecho a impedir que utilicemos nuestras ambulancias, etc.
En todo caso, desde el comienzo del conflicto nos impiden el aprovisionamiento en gasolina y nosotros dependemos de las refinerías extranjeras para garantizar alrededor de la tercera parte de nuestras necesidades. Eso es lo que ha generado la actual escasez. Teóricamente, sólo tienen derecho a inspeccionar los barcos para garantizar que no transporten armas. En la práctica, sin embargo, han desplegado ilegalmente un bloqueo marítimo.
Han impedido el paso a barcos rusos y chinos. Esos Estados deben presentar una denuncia al Comité de Sanciones de la ONU para cuestionar la interpretación de las resoluciones. Es un procedimiento interminable y disuasivo. No existe ninguna base legal que los autorice a actuar así, pero lo están haciendo por la fuerza, seguros de su impunidad.
A pesar de todo, nosotros logramos obtener suministros por vía terrestre, pero eso es ínfimo. Se necesita un mes para transportar por camión todo lo que podríamos descargar en nuestros puertos en un solo día. Red Voltaire: Libia ha emprendido numerosas construcciones en materia de infraestructura, como las gigantescas obras de irrigación del Man Made River.
Red Voltaire: ¿Qué proyectos están en vías de realización?
Mohammed Siala: Existe una vía de ferrocarril que recorre el norte de África, exceptuando Libia. Nosotros queremos completarla para integrarnos a la economía regional y hacerla más dinámica. Los chinos están construyendo el tramo entre Túnez y Sirta y los rusos están a cargo del tramo que va de Sirta a Benghazi. Había una negociación en marcha con Italia sobre el tramo Benghazi-Egipto y las locomotoras. También habíamos emprendido la construcción de una vía transcontinental norte-sur, con el tramo Libia-Yamena. Son inversiones considerables y de interés nacional y creíamos que podíamos contar con la ayuda del G8. Ya nos lo habían prometido y nos tomaron desprevenidos.
Somos duros en cuestiones de negocios y recurrimos al sistema de licitaciones para que los aspirantes a la obtención de los contratos tengan que bajar sus precios. Durante su visita a nuestro país, Vladimir Putin estuvo de acuerdo en alinear las tarifas de las empresas rusas con las de sus competidoras chinas. Así logramos una diversificación de nuestros asociados.
Red Voltaire: ¿Qué va a pasar con esos proyectos ahora que hay guerra?
Mohammed Siala: Todos esos trabajos están detenidos por causa del congelamiento de nuestros fondos. Pero seguimos adelante con las licitaciones para los tramos que quedan porque estamos seguros de que la guerra es una cuestión momentánea y que los trabajos van a reanudarse. Estamos preparándonos para continuar con los contratos temporalmente interrumpidos por razones de «fuerza mayor».
Nuestros asociados están desesperados con el problema de la guerra. Los chinos tienen aquí contratos por un monto de 20 000 millones de dólares y los turcos por 12 000 millones. Les siguen los italianos, los rusos y los franceses. Esta agresión no favorece sus intereses, y todavía menos su participación en ella. Es probable que algunos hayan recibido compensaciones por debajo de la mesa, pero no tenemos información precisa sobre ese tema. Otros esperan beneficiarse más conquistando nuestro país y se atribuyéndose a sí mismos los contratos de reconstrucción.
Red Voltaire: ¿Qué consecuencias tiene para África el congelamiento de los fondos libios?
Mohammed Siala: Al bloquear nuestros fondos han bloqueado también nuestras acciones en pro del desarrollo de África. El continente no logra exportar otra cosa que productos no elaborados. Nosotros invertimos para que esos productos se elaboren en África y para que los comercialicen los propios africanos. Se trata de crear empleos y de mantener la plusvalía en África. Por un lado, los europeos nos animan [en ese sentido] porque esa política disminuye el flujo migratorio. Pero por otro lado se oponen porque tienen que tendrían que renunciar a la explotación colonial.
Los occidentales quieren mantener a África en posición de exportador de productos no elaborados, de materias primas.
Por ejemplo, cuando el café que produce Uganda se exporta hacia Alemania, donde finalmente se comercializa, la plusvalía se queda en Alemania. Nosotros hemos financiado instalaciones que permiten realizar la torrefacción del café, molerlo, empaquetarlo, etc. La remuneración de los ugandeses pasó así del 20% al 80%. Claro, nuestra política entra en conflicto con la de los europeos. Y eso es un eufemismo.
Nosotros financiamos el cultivo de arroz en Mozambique y en Liberia a razón de 32 millones por cada proyecto, y creamos en cada caso 100 000 empleos. Nuestro objetivo es, en primer lugar, [alcanzar] la autosuficiencia alimentaria de cada Estado africano y, sólo después de eso, la exportación. No cabe duda de que eso no le conviene a los que producen y exportan arroz, sobre todo si lo utilizan para especular.
También construimos carreteras, por ejemplo, desde Libia a través del Níger. Ya conectamos Sudán con Eritrea, lo cual constituye un gran cambio para la economía regional y abre perspectivas de desarrollo. Ahora es posible la circulación de mercancía por carretera y por mar.
Red Voltaire: ¿Puede decirse que Libia tiene pocas alianzas diplomáticas pero que ustedes han establecido alianzas económicas que los protegen? ¿Podemos hablar de una diplomacia de las inversiones?
Mohammed Siala: Sí.
Por ejemplo, nosotros dedicamos 50 millones de dólares a financiar la construcción –por empresas chinas– de un canal de 32 kilómetros para la irrigación de zonas agrícolas en Malí.
El congelamiento de nuestros fondos interrumpe importantes proyectos agrícolas en ese país. Si [el congelamiento] se mantiene, habrá rápidamente un problema de alimentación y la población reanudará y acelerará la migración hacia Europa. En definitiva, los europeos no pueden darse el lujo de detener nuestro trabajo a favor del desarrollo del continente [africano]. No tienen ninguna alternativa que ofrecer ante nuestra política.
Red Voltaire: ¿Disponen ustedes de algún sistema que les permita pagar sus pedidos al mercado internacional a pesar del congelamiento de sus fondos? Su país está siendo agredido, así que me refiero, por supuesto, a la compra de armas y municiones.
Mohammed Siala: Ya llevamos 4 meses y medio de resistencia. Nosotros aprendimos la lección del embargo y ya estábamos preparados desde el primer día. Muchos Estados nos observan y ellos también quieren tomar medidas similares para protegerse del imperialismo.

domingo, 17 de julio de 2011

Las pruebas más evidentes de la mentira originaria en la guerra contra LIBIA

¿Cómo pueden todos los medios y las opiniones públicas de los países occidentales que se referencían a si mismos como la cuna original y el modelo  de la democracia universal negar, una y otra vez, repetidamente, descarada y cínicamente, la pavorosa fuerza de las filmaciones de multitudinarias manifestaciones de apoyo a Gadafi, que están sucediendo actualmente? Las imágenes han estado subiéndose casi en secreto a Internet, porque los medios se niegan unánimentemente  a publicar ninguna referencia a las mismas. Como si la democracia no fuera lo que el pueblo piensa y manifiesta en vivo y en las calles con toda evidencia, sino solo la versión interesada que los medios quieren trasmitir, deformando la realidad de cada país. Estas imágenes han venido registrándose con cámaras de la televisión estatal libia, o algunas solitarias fuentes adicionales, en repetidas ciudades a lo largo de un país, en los últimos 10 días y con su contundencia simple y su manifiesta imposibilidad de trucaje o manipulación, porque acá no hay cortes, no hay escenificaciones puestas para la cámara, desmienten tajantemente la mentira inicial de esta nueva guerra de propaganda que se reutiliza, apenas con algún retoque, en el caso libio, y desarman el embrión de "información" original fraudulento que sostuvo el inicio de esta  nueva guerra de conquista ¿Cómo puede ser que una civilización, que se considera a si misma como intelectualmente más formada que el resto del mundo, persista en leer a diario en todos y cada uno de los medios del mundo en los que se machaca con el latiguillo que usan los domadores con sus cachorros amaestrados que Gadafi gobierna desde hace 41 años con una férrea dictadura que avasalla a su pueblo. Acá siguen los enlaces a estas imágenes y luego sigue este artículo:

01.07.2011 Manifestación multitudinaria Trípoli (Libia)
(www.youtube.com/watch?v=WRE-y8KNEsc)
07.07.2011 Manifestación multitudinaria Sabha (Libia)
(www.youtube.com/watch?v=oZBiMIJ1gjA&feature=player_embedded)
14.07.2011 Manifestación multitudinaria Ajelat (Libia)
(www.youtube.com/watch?v=birEDIfANTw&feature=player_embedded)
15.07.2011 Manifestación multitudinaria Zleetin (Libia)
(www.youtube.com/watch?v=ILo7STMlsw8&feature=related)
16.07.2011 Manifestación multitudinaria Zawia (Libia)
(www.youtube.com/watch?v=MRvY-SW2Z88&feature=player_embedded)

 
¿Cómo se puede dejar pasar esta mentira básica sin contrastarla con las multitudes millonarias que muestran estas manifestaciones de apoyo al gobierno libio? 
Para empezar se debe descartar la más mínima honestidad de los medios, a los que no hay que reconocer ninguna intención independiente porque, como se sabe, sus objetivos están  estructurados y conformados por las planes de inversión de los capitales que son sus dueños no tan en las sombras y los comandan férreamente. Como es el caso, además, de su militancia por los mercados, por la necesidad "ineludible" de los saqueos a los fondos sociales. Las corporaciones internacionales poseen y manipulan la verdad que tu y yo leemos. ¿ Pero, por otra parte, cómo se puede aceptar sin indignación que este torbellino de imágenes de filmaciones de manifestaciones multitudinarias de apoyo popular a un gobierno como el de Libia, satanizado por occidente, no genere un automático y nítido desmentido en las conciencias de la opinión pública internacional que, por otra parte, ha estado mayoritariamente comiendo del vidrio envenenado de los medios, apoyando con su consternación dubitativa por las falencias democráticas de Gadafi, la no interferencia hacia un ataque armado de la OTAN.  Como si fuera posible y deseable y útil además, ante todo, lanzar ataques de la OTAN contra cualquier estado que no cumpla lo que exigen los antidisturbios en Europa.
No podemos imaginar, en una circunstancia similar, a ninguno de los gobiernos occidentales por más que hayan sido electos mediante esta parodia de democracia bipartidista -en que solo puedes votar entre lo que los dos medios empresariales en pugna te presentan como alternativa-, que hipotéticamente aislados diplomáticamente del mundo con un cerrojo similar al ahora impuesto a Libia pudieran convocar, bajo el espeso bombardeo a sus ciudades, ¡y tener éxito en la convocatoria!,  a gigantescas y multitudinarias manifestaciones de apoyo a su gobierno (como si prueban que lo hacen los libios con el suyo) y en contra de la OTAN y la intervención extranjera.
La guerra iniciada con el falso argumento de que existía un pueblo sometido por una dictadura, debería caérseles de las caras, desmoronarse como una nueva máscara cínica de las que utiliza la Dictadura del Capital para administrar el territorio universal, trascendiendo la verosimilitud y la verdad más simples y escuetas: señores dubitativos, ejerzan un poco de honestidad en su autoexamen y empiecen a reconocer que toda esta serie de filmaciones desmienten escandalosamente la flagrante y canallesca información que extendió el cheque en blanco para el ataque a un país. Este envenenado supuesto nunca apoyado con pruebas fehacientes (¡cuatro meses después de iniciada la guerra con esta mentira!), de que un gobierno dictatorial aislado de su pueblo, usaba a su ejército para reprimir a su población civil. La población civil está acá, millonariamente en las calles, apoyando a su gobierno en la defensa de su soberanía y sus recursos naturales.
No obstaculicen más el NO A LA GUERRA EN LIBIA.  Alto del fuego inmediato. "Con elecciones libres y nueva constitución con observadores  internacionales", como ha propuesto la parte libia, y rechazado los rebeldes, o sea, los empleados libios de la OTAN.

jueves, 14 de julio de 2011

Ataque contra un blog que se opone a la guerra de la OTAN a Libia

La revista Rebelión publica hoy jueves 14 de julio un artículo despectivo y deplorable contra el blog Leonor en Libia. El periodista basa las "argumentaciones" que usa para denigrar a la autora de ese blog en que él estuvo "más o menos" hace dos meses en la zona "liberada", empotrado en una patrulla de apoyo a la OTAN, con seguridad.
De pluma de tan escueto calado como la que sostiene este señor Alberto Arce para encararse con la autora del blog surge la siguiente comparación de la "represión masiva" del gobierno de Libia con la España de Zapatero: "Y sin obviar la represión policial, brutal para nuestro estándares europeos, no les sucedió a nuestros indignados lo que a los libios cuando hicieron lo mismo el 17 de febrero. Nuestro estado no envió a una división acorazada con artillería pesada y ametralladoras de 14.5 mm a disparar contra la multitud reunida en la Puerta del Sol ni ubicó francotiradores en la Calle Mayor para disparar a todo cuanto se movía.
Porque eso es exactamente lo que hizo el régimen del Coronel Gadafi contra los miles de personas que comenzaron a manifestarse en febrero en las calles de Misrata".
Una pluma de tan escueto calado debería poder sustentar por una vez con pruebas fiables, la remanida "brutal violencia del ejército libio para nuestros entándares europeos", a la que se recurrió para iniciar los bombardeos de la OTAN y se recurre una y otra vez todos los días para prolongar las matanza y la destrucción irracional, la desenfadada guerra de conquista y de pillaje del petróleo de un país en desarrollo. Este periodista de escueto calado lo afirma por enésima vez sin mostrar sin embargo, una vez más, una sola prueba filmada que muestre algo similar a lo que en cambio si se vio en demasía, "mostrando los estándares europeos de represión", en las filmaciones de los antidisturbios en la Plaza de Cataluña, no hace mucho tiempo, y un mes después en Grecia, a europeazo limpio, en Atenas.
No le importa a este plumífero de escueto calado que hace apenas diez días se hayan publicado imágenes incontestables, eso si, casi en secreto, gracias al agujero informativo del que él es cómplice evidente, en las que un millón de personas, estas sí bien documentadas por imágenes filmadas se manifestaron en Trípoli, a riesgo de ser bombardeados por la OTAN, para oponerse a la intervención extranjera y a la invasión imperialista.
En este mismo blog pueden verse en otra entrada anterior las impactantes imágenes que a cualquier persona con un mínimo de honestidad, y con dudas, haría reflexionar seriamente sobre las argumentaciones esenciales de esta nueva guerra espúrea y basada en falsificaciones.
Los libelos denigratorios de un periodista como este que funge de izquierda cumplen un rol evidente en la postergación de una campaña de No a la Guerra en Libia, están diseñados para evitar una reacción masiva contra la matanza de civiles y la destrucción de las infraestructuras de Libia que llevan a cabo actualmente los gobiernos de EEUU y Europa, como otra faceta más, en todo coherente, con las políticas de bombardeos sociales contra sus propias poblaciones.

lunes, 11 de julio de 2011

Héctor Mandragon en entrevista en Pagina 12

La otra cuestión que he seguido es el tema de los ciclos económicos, con sus ascensos y crisis cíclicas, y su relación con las guerras. En su momento fue la guerra en Yugoslavia, luego la guerra de Irak y ahora nuevamente en Libia, y esto tiene que ver directamente con el desarrollo de los ciclos económicos donde la guerra aparece como salida a la crisis de dichos ciclos.
–En esa línea, piensa la guerra un como momento en el que se intensifica la acumulación capitalista...

–Sí, pero es interesante ver las diversas formas en que se da esa acumulación. Por un lado, está la acumulación por desposesión, que es una de las cosas que consigue la guerra de modo evidente: tú ves que llegan, se llevan el petróleo y ya. Otra es la acumulación por destrucción de capitales, que se da en el momento mismo de crisis: cuando una empresa quiebra, las máquinas siguen existiendo ahí, pero ya no como capital, son ahora máquinas desarmadas que ya nadie usa, ya no son capital desde el momento que dejan de producir utilidad y pierden su valor económico. Los empresarios que logran sobrevivir a la crisis se benefician de esa gran destrucción, y se convierten en monopolios o se apoderan del mercado de los que quebraron. O incluso compran baratísimas las máquinas que fueron abandonadas, se apoderan de lo que queda por destrucción de capital. Hay también acumulación por captura de mercados, tanto por la competencia como porque a partir de la guerra se pueden abrir mercados para vender ciertos productos. Finalmente, hay acumulación por explotación de la mano de obra, de los trabajadores desplazados por el conflicto bélico, que se convierten en migrantes ilegales superbaratos que pasan a ser parte del ejército de reserva de mano de obra del capital mundial.
–Todo este proceso se dio varias veces sólo en la última década... –Si vemos la guerra de Irak, tenemos todas las formas de acumulación, porque primero destruyeron el capital de Irak, luego se apropiaron de su mercado, tomaron el petróleo y además movieron el mercado de productos de guerra. Fue un negocio completo que sirvió para salir de la crisis de 2001-2002. Luego de la guerra, en 2003, llegó otro nuevo auge de la acumulación capitalista hasta 2008, cuando otra vez EE.UU. entró en crisis, y comienza financiar a los bancos, devalúa el dólar, comienza la guerra de las monedas, pero entonces Europa entra en la crisis, Grecia, Irlanda, Portugal, España. Hasta Inglaterra tiene una deuda enorme. Entonces, ¿cuál es la salida? Otra vez lo mismo: la guerra.

domingo, 10 de julio de 2011

Tsunami para Israel advierten sus propios empresarios Por Noam Chomsky

Mientras hoy Israel está deteniendo a cientos de activistas de la paz que han intentado llegar a Gaza para mostrar su apoyo a la región bloqueada por el estado sionista,  hoy diario Publico ha dado a conocer este artículo de Noam Chomsky.

El pasado mayo, en una reunión a puerta cerrada en la que participaron gran parte de los líderes empresariales de Israel, Idan Ofer, magnate de un importante holding, advirtió: “Nos estamos convirtiendo rápidamente en Suráfrica. El duro golpe de las sanciones económicas se sentirá en cada familia de Israel”.
La principal preocupación de estos líderes empresariales era la sesión de septiembre de la Asamblea de la ONU, donde las autoridades palestinas planean exigir el reconocimiento del Estado palestino.
Dan Gillerman, exembajador israelí de la ONU, advirtió a los participantes de que “la mañana después del presumible anuncio del reconocimiento del Estado palestino, comenzará un doloroso y dramático proceso de sudafricanización” –refiriéndose a que Israel se convertiría en un Estado paria, sujeto a sanciones internacionales–.
En esa y en posteriores reuniones, los oligarcas exhortaron al Gobierno a que pusiera en marcha iniciativas basadas en las propuestas de la Liga Árabe Saudí y el acuerdo extraoficial de Ginebra de 2003, en el que negociadores de alto nivel de Israel y Palestina detallaron un acuerdo de dos estados, que fue bien recibido en la mayor parte del mundo, rechazado por Israel e ignorado por Washington.
En marzo, el ministro de Defensa israelí Ehud Barak advirtió de que las futuras acciones de la ONU provocarían un tsunami. El temor es que el mundo condene a Israel no sólo por violar las leyes internacionales, sino también por perpetrar actos criminales en un Estado reconocido por la ONU. Estados Unidos e Israel están realizando una intensa campaña diplomática para evitar el tsunami. Si fallan, es probable que se reconozca un Estado palestino.
Más de cien países ya reconocen a Palestina. Reino Unido, Francia y otras naciones europeas han elevado la categoría de la delegación general en Palestina a “misiones diplomáticas y embajadas, un estatus normalmente reservado sólo a estados”, tal y como ha observado Victor Katan en el American Journal of International Law.
Palestina ha sido asimismo admitida en organizaciones de la ONU, excepto en la UNESCO y la OMS, que han eludido el tema por miedo a que Estados Unidos deje de financiarlos. No es una amenaza sin sentido. En junio, el Senado de Estados Unidos aprobó una resolución que amenaza con suspender las ayudas a la Autoridad Palestina si persiste en su iniciativa en la ONU. Susan Rice, embajadora de Estados Unidos en la ONU, advirtió de que “no había una mayor amenaza” para la financiación de Estados Unidos a la ONU que “la posibilidad de que Palestina alcanzase la condición de Estado con el respaldo de los estados miembros”, según informó The Daily Telegraph. El nuevo embajador de Israel de la ONU, Ron Prosor, dijo a la prensa israelí que el reconocimiento de Palestina por parte de la ONU “conduciría a la violencia y a la guerra”.
Presuntamente, la ONU reconocería a Palestina dentro de las fronteras internacionalmente aceptadas, incluyendo Cisjordania y Gaza, y la devolución a Siria de los Altos del Golán que Israel se anexó en diciembre de 1981, violando un mandato del Consejo de Seguridad de la ONU. En Cisjordania, los asentamientos y acciones para mantenerla son una clara violación del derecho internacional, tal y como han afirmado la Corte Internacional y el Consejo de Seguridad. En febrero de 2006, Estados Unidos e Israel impusieron el bloqueo a Gaza, después de que la “facción incorrecta” –Hamás– ganase las elecciones en Palestina, reconocidas como libres y justas. El bloqueo se volvió mucho más duro en junio de 2007 después del fracaso de un golpe militar instado por Estados Unidos para derrocar al Gobierno electo.
En junio de 2010, el bloqueo de Gaza fue condenado por el Comité Internacional de la Cruz Roja
–que rara vez difunde este tipo de informes–, alegando un “maltrato colectivo impuesto en clara violación” de las leyes humanitarias internacionales. La BBC informó de que el Comité Internacional de la Cruz Roja “describe un sombrío retrato de las condiciones en Gaza: hospitales con escasos materiales, apagones de luz que duran varias horas al día, consumo de agua no potable” y, por supuesto, la población recluida.
Este bloqueo delictivo se extiende debido a la política seguida por Estados Unidos e Israel desde 1991, que busca separar Gaza de Cisjordania para garantizar que un eventual Estado palestino fuese efectivamente contenido entre potencias hostiles –Israel y la dictadura jordana–. Los Acuerdos de Oslo, firmados por Israel y la Organización para la Liberación de Palestina en 1993, impiden la separación de Gaza de Cisjordania.
Otra amenaza para la política de Estados Unidos e Israel es la Flotilla de la Libertad, que busca desafiar el bloqueo de Gaza enviando mensajes y ayuda humanitaria. En mayo de 2010, la última tentativa de este tipo condujo a un ataque israelí en aguas internacionales –un grave delito de por sí– en el que nueve pasajeros fueron asesinados. Esta acción fue ampliamente condenada fuera de Estados Unidos. En Israel mucha gente está convencida de que los comandos fueron las víctimas inocentes, atacadas por los pasajeros, otro signo de la autodestructiva irracionalidad que recorre la sociedad.
Esta vez, Estados Unidos e Israel han intentado bloquear definitivamente la Flotilla. La secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, autorizó prácticamente la violencia, declarando que “los israelíes tienen derecho a defenderse” si las flotillas “provocan acciones como la entrada en aguas israelíes”, esto es, las aguas territoriales de Gaza, como si Gaza perteneciera a Israel.
Grecia ha estado de acuerdo en impedir que los barcos partieran (es decir, los barcos que no fueron saboteados), aunque, a diferencia de Clinton, Grecia se refiere correctamente al “espacio marítimo de Gaza”. En enero de 2009, Grecia destacó por no aceptar el envío de armas estadounidenses desde puertos griegos a Israel durante el cruel ataque de Estados Unidos e Israel a Gaza. Pero con la actual coacción económica en la que se encuentra, es evidente que Grecia no puede arriesgarse a tan inusual acto de integridad.
Ante la pregunta de si la Flotilla era una “provocación”, Chris Gunnes, el portavoz de la Agencia de la ONU para los refugiados de Palestina, la mayor agencia de ayuda a Gaza, describió la situación como desesperada: “Si no hubiera crisis humanitaria, si no hubiera crisis en la práctica totalidad de los aspecto de la vida en Gaza, no sería necesaria la Flotilla (el 95% del agua de Gaza no es potable; el 40% de todas las enfermedades surgen por el agua; el 45,2% de la población activa se encuentra sin empleo; el 80% de la población depende de ayudas; se ha triplicado la población en situación de miseria desde que se inició el bloqueo). Deshagámonos del bloqueo y no se necesitará ninguna flotilla”.
Iniciativas diplomáticas como la estrategia del Estado palestino y, en general, las acciones no violentas amenazan a aquellos que mantienen un monopolio efectivo de la violencia. Estados Unidos e Israel están intentando mantener posiciones indefendibles: la ocupación y su subversión de un consenso antiguo, aplastante, respecto a un arreglo diplomático.